jueves, abril 10, 2008

A petición de Caracortada: E-Books

Voy a comenzar a hacer una lista de páginas donde se puedan descargar libros electrónicos, y voy a comenzar con una excelente que me acabo de encontrar, se trata de:

El Último Libro


Trae un link en Verde Chingamelavista, allá mero arriba, donde dice EBOOKS! y la colección es bastante buena. Ya me he descargado el archivo de Pohl, y a ver que pepeno después. De lo mejor es que no están archivados en Rapidshare, que es muy bueno el Rapid, no digo que no, pero luego es tedioso con aquello de "ya llegó usted al límite, espere tres días y once horas para descargar de nuevo". Ahora que no sé la verdad si los servidores donde están estos libros: In.solit.us, 4shared y MediaFire tengan alguna restricción. Anyway, muy buena página... o blog, más bien.

miércoles, abril 09, 2008

Ora sí que la fregamos mi Huguito

¡Pero es que esto es uno de los mayores sinsentidos en la historia de los sinsentidos que carecen de sentido!
Los Simpson salen de TV venezolana por regulación oficial
Un canal de televisión de Venezuela decidió sacar del aire a Los Simpson y sustituir a la disfuncional familia animada por salvavidas escasamente vestidos.
La asesora de comunicaciones corporativas del canal privado Televen, Elba Guillen, dijo el lunes que la decisión se tomó después que la agencia reguladora del gobierno recibió quejas de los televidentes.
"Hubo que sacarlo", dijo Guillén. "Ellos consideran que es una serie como no apta para el horario porque no es apta para niños".
Sin especificar los elementos del programa que se consideran ofensivos, el organismo expresó que el programa "presuntamente podría infringir" la normativa nacional que prohibe los "mensajes que atentan contra la formación integral de niños, niñas y adolescentes".
Guillén indicó que corresponde a la gerencia de Televen si Los Simpson puede ser mostrado en otro momento del día.
"Baywatch", que presenta un elenco en seductores trajes de baño trabajando como salvavidas, reemplazó a la serie animada desde el viernes.
La estación no ha recibido ninguna queja acerca de la difusión de Baywatch, comentó el gerente general de la estación, Germán Pérez Nahim, citado por el diario Ultimas Noticias. El ejecutivo no estuvo disponible el lunes para un comentario.
En relación a Baywatch "hasta ahora no hemos tenido señalamientos" y con esta serie "esperamos seguir teniendo buen rating (nivel de audiencia), porque Los Simpson funcionaba muy bien, tanto, que en el histórico del canal presentó los más altos registros de sintonía en ese horario matutino", dijo Pérez al periódico.
La Comisión de Telecomunicaciones, que tiene la facultad de imponer multas en algunos casos, sostiene que Televen tendrá la oportunidad de presentar su defensa por haber difundido el programa durante el horario familiar.

A ver, vamos a ver, ¿cual es uno de los programas de TV más críticos del American Way of Life? -exceptuando Family Guy y American Dad, que van tan lejos que fallan en entregar el mensaje-. ¡Pues Los Simpson! ¿Donde se pueden encontrar críticas desalmadas de los políticos y las políticas estadounidenses? ¡El Los Simpson! Y ahora, Venezuela, gobernada por el enemigo declarado de USA, Hugo Chávez ¡Prohíbe los Simpson!. Lo dicho, carece de sentido. Ahora, en ninguna parte de la nota dice que esto tenga que ver con decisión alguna de Chávez, pero dado que el tipo es un tirano que se mete en cada aspecto de su nación. ¡Pues que haga algo al respecto, Simpson a todas horas, caítulo tras capítulo! Es más, le recomiendo al buen Hugo que satura sus canales de American Dad, Family Guy, That's My Bush y Li'l Bush, programas todos que se dedican a humillar -y bien merecido que lo tiene- el imbécil que los USAeños tienen por líder.
No mi Chávez, no, la estás regando al permitir esto. ¡Y luego que los sustituyan por Baywatch! Vamos, que es es como... es como... es como haer algo muy muy feo y muy muy repugnante, tanto así que no existen metáforas. Es más, en el futuro cuando alguien cambie algo muy bueno, por un pedazo de mierda, se va a emplear la metáfora: "Está cambiando Los Simpson por Baywatch", tanto así.
¿Y quienes son esos imbéciles y calenturientos televidentes que se quejaron de que los Simpson hagan pensar a sus engendros, pero están felices de sentarse, con los calzones bajados, a ver Baywatch junto a una caja de kleenex y crema para las manos?
Lo único bueno que va a salir de todo esto, es que la siguiente vez que los mochos de aquí quieran que se prohíba a Los Simpson, por que dios y san juan pablo segundo lo prohíba sus niños puedan llegar a pensar, les vamos a poder decir: "¿ah si, quieres prohibir a los Simpson? fíjate que eso exactamente hizo el comunista, ateo y comeniños de Hugo Chávez, quieres ser igual que él?" Eso deberá ser suficiente para pararlos en seco que se vayan a consultar a su párroco de confianza.

Los Simpson salen de TV venezolana por regulación oficial - Prodigy/MSN Entretenimiento : Cine > Artículo

martes, abril 08, 2008

Del rincón de Caracortada: Las Naves del Tiempo

Debería pasar más seguido, que los grandes y queridos clásicos fueran revisitados de esta manera, pero exactamente de esta manera.
Muy bien, primero tengo una confesión qué hacer, no soy un enamorado de los clásicos, aun de los clásicos de Ciencia Ficción. Leí La Guerra de los Mundos, pero no me fue fácil hacerlo, y de La Máquina del Tiempo creo que no recuerdo mucho que digamos. No me es fácil acomodar la mente a los esquemas que seguían los escritores de hace algunas décadas, y los momentos de inocencia, o de chauvinismo que solían tener me sacan de mis casillas. Bueno, si H.P. Lovecraft me resulta aburrido a veces (todas esas narraciones sobre ciudades de marfil, titánicas y hermosas, simplemente no las aguanto), y su racismo furibundo es algo que tiene uno que tragarse a fin de seguir la historia.
Pero cuando una historia clásica es revisitada como lo ha sido La Máquina del Tiempo, con esta su continuación autorizada, Las Naves del Tiempo, es como uno de mis sueños hechos realidad.
No se trata de una de esas revisiones en las que la historia se escribe de nuevo, ahora con los valores modernos, en esas se pierde la perspectiva y terminan siendo historias nuevas, poco relacionadas con las originales. Esta es una continuación, tal cual, y Stephen Baxter cuida que así sea. El Viajero es el mismo, e incluso piensa y habla de manera casi idéntica a su encarnación Wellsiana, pero en este libro, el Viajero evoluciona.
Lo podríamos ver como una crítica amororsa de Baxter hacia H. G. Wells, a la hora narrar como el Viajero observa su yo del pasado, el de la primera novela, y se da cuenta de sus muchos errores, de sus traumas y de los prejuicios que le llevaron a actuar de determinadas maneras, todo esto sin que la historia externa cambie acorde con esas "críticas", lo que cambia es el interior del personaje.
Baxter tiene bastante éxito a la hora de tomar un personaje creado por alguien más, y ponerlo, tal cual, en un nuevo ambiente que es, aparte, extensión de su ambiente anterior.
No encontré contradicciones evidentes, Baxter no reescribió a Wells, sino que construyó sobre la obra de éste, y esto en ocasiones vuelve la historia un tanto confusa; por ejemplo no se explica uno ciertas reacciones del Viajero, hasta que recuerda que no es un hombre de esta época, sino de finales del siglo XIX, con todos los valores y prejuicios propios de la época.
Incluso, Baxter va hasta realizar un ligero análisis psicológico de la mente del viajero, que no es otra cosa que un análisis de la mente de Wells, y de lo que pudo haberlo llevado a crear a creaturas como los Morloks.
Las Naves del Tiempo es una novela de nuestra época, ya se deja atrás de xenofobia, y en el nuevo encuentro con los Morloks, e una historia alterada por las acciones del viajero, éste se ve obligado a dejar atrás sus preconceptos y su sentido de la superioridad. Si La Máquina del Tiempo fue una fábula de lo que podría pasar al ser humano en el futuro, una pieza sacada hasta cierto punto del miedo al progreso, Las Naves del Tiempo es una fábula de la pequeñez de miras del hombres, que trata de medir al universo con sus propios esquemas. El tono cambia, del pesimismo de Wells, a un optimismo Baxteriano que, sin embargo, resulta hasta algo cruel con el ser humano, cuando le dice que tal vez tu, hombre, como hombre, no vaya más allá de otros pocos milenios, pero tu descendencia, esto es descendencia de la mente, no de la carne, puede seguir tal vez para siempre.
Incluso las explicaciones nuevas sobre la física, Bater las sabe hacer encajar a la perfección en el esquema planteado por La Máquina del Tiempo; y me pareció captar un guiño pícaro en las primeras partes del libro cuando Nebogipfel, el nuevo morlok, pregunta impaciente al Viajero cómo funciona la máquina del tiempo, y después de una explicación vaga, al estilo de la ciencia ficción de principios del siglo XX, insiste, "Sí, pero cómo funciona", demandando explicaciones que el lector principios del siglo XXI demanda.
Sí se vuelve algo vago hacia el final, cuando comienza a hablar de las multiplicidades, pero no una vaguedad inesperada, pues a lo largo del libro uno se da cuenta de que conforme avance, las cosas serán más y más complicadas.
Al final, Baxter redime a un personaje que en su tiempo no necesitaba ser redimido, que el lector amante de los clásicos no necesita ve redimido, pero cuya redención sí requerimos algunos lectores, y en el proceso redime al propio H.G. Wells. Es lo que pasa en la ciencia, los grandes genios del pasado siempre terminarán quedándose cortos cuando los conocimientos crecen, y aun cuando se les reconoce su genial trabajo, también se tiene en cuenta que eran productos de su tiempo, y que la nueva información reemplaza a la anterior ¿por que no iba a pasar lo mismo con la ciencia ficción?.

lunes, abril 07, 2008

jueves, abril 03, 2008

Chihuahua Militarizado II

A continuación un extracto de la columna Ráfagas, que aparece en El Heraldo de Chihuahua del viernes 4 de abril del 2008. La columna no aparece firmada en el periódico:

DERECHOS.- ¿Dónde estaban los defensores de los derechos humanos cuando las calles de Chihuahua, las escuelas, las colonias y hasta los restaurantes y bares estaban ocupados o controlados por el narcotráfico?, ¿dónde están las quejas de los derechohumanistas en contra de los asesinatos, levantones, ejecuciones, vejaciones, atropellos y abusos de los narcotraficantes?
DERECHOS I.- ¿Porqué no levantan su grito y su protesta, cuando afuera de las escuelas primarias y secundarias, “puchadores” les venden drogas a niños y jóvenes envenenándoles el alma y el cuerpo? ¿Acaso las vida y salud mental de nuestros jóvenes no merecen eso y más? ¿No resultarán sospechosas esas voces que ahora apelan al respeto de los derechos humanos de policías retenidos por el ejército para investigarlos sobre posibles nexos con el narcotráfico?
DERECHOS II.- Una de las razones del éxito del narcotráfico es su capacidad de cooptar y corromper a policías, lo que se conoce como el crimen administrativo. Ahí es donde han creado redes de protección y compra. ¿Por qué ahora protestar porque interrogan e investigan a unos policías? ¿Levantaron también esas protestas y apelaron a los Derechos Humanos cuando esos policías, ahora retenidos, detenían a presuntos responsables de un delito?
DERECHOS III.- Como siempre, el manejo de los derechos humanos tiene una connotación muy definida: si se trata del Ejército, en automático la cultura tradicional de izquierda tiende a condenar cualquier acción; y luego otros, preocupados en que sus intereses se puedan ver perjudicados, protestan, o los mismos narcotraficantes promueven protestas antes los medios de comunicación.
DERECHOS IV.- Pero la pregunta sigue estando en el aire: ¿Dónde estaban esas voces derechohumanistas, cuando el temor, miedo y zozobra se habían apoderado de las familias chihuahuenses y no había poder que contuviera la violencia del narcotráfico? ¿Donde estaban?

En una entrada anterior hablaba de la militarización del estado de Chihuahua, en especial de la ciudad capital, y comentaba que me parece, tristemente, un mal necesario, un mal muy grande, sin duda, pero igualmente necesario ante los recientes eventos.
Ahora, recientemente los medios han criticado la reacción de diversos grupos derechohumanistas que se han manifestado en contra de ciertas acciones del ejército.
Cuestionar la acción de los representantes de los derechos humanos ante la militarización llevada a cabo por la lucha contra el narcotráfico, es básicamente espurio. La mención de la "cultura tradicional de izquierda" es, me parece, gratuita, innecesaria.
Los representantes de los derechos humanos, históricamente han tenido su origen en la respuesta ciudadana a las acciones del estado, pues con todos los beneficios que trae el Estado, también conlleva muchos riesgos para la vida e individualidad del hombre, riesgos que las comisiones de derechos humanos fueron creadas para combatir. Se trata de evitar excesos en aras de la autoridad, de la justicia o del interés del estado, se trata de proteger a los inocentes, y de una idea fundamental: “Es preferible que queden libres cien hombres culpables, a que un solo inocente sufra un castigo inmerecido”.
Pero lo anterior no es el punto a tratar, sino la crítica lanzada contra los representantes de los derechos humanos por su aparente inacción contra el narcotráfico, pero su pronta respuestas contra el ejército. Y la cuestión es que no es misión de las comisiones defensoras de los derechos humanos luchar contra los criminales, pues esto es responsabilidad de las fuerzas del orden, para ello existen. Es ilógico mezclar en el combate al crimen a los defensores de los derechos humanos, pues no tienen manera de involucrarse en ello, y esto es de simple sentido común. Los criminales, en este caso los narcotraficantes, no responden a ninguna estructura aceptada de la sociedad, no son parte de una secretaria, no obedecen al estado, y obviamente no han firmado los tratados de protección a los derechos humanos, esto porque se trata de organizaciones ilegales, más claro no puede estar el caso.
¿Cómo, dado lo anterior, podrían las organizaciones defensoras de los derechos humanos hacer palanca o tener un terreno en el cual librar una batalla, exponer una denuncia, o simplemente plantear su caso? No pueden acudir ante la Secretaría Estatal de Narcotráfico y denunciar que ésta ha violado los estatutos contra la tortura y la privación de la libertad. ¿Qué se espera de los derecho humanistas en un clima de violencia criminal? La más que se puede esperar de ellos es una acción pacifista ante los cañones de las AK-47, tal vez una nueva puesta en escena de la famosa manifestación de la plaza de Tiananmen, con los derecho humanistas desarmados ante las fuerzas del crimen organizado.
Tal vez se espera acciones de martirio por parte de los derecho humanistas, o más de esas manifestaciones sin sentido contra la violencia, pues tratándose del crimen organizado, de una cosa podemos estar seguros, no van a escuchar el clamor popular, no se van a detener porque cien, mil o un millón de personas marchen en contra de sus actos. Si no obedecen la ley, que es la voluntad no sólo de un grupo de personas, no sólo de esta generación, sino la voluntad de la nación desde hace décadas, mucho menos van a escuchar estos nuevos clamores.
Luchar contra el crimen y la violencia con manifestaciones, o con protestas de parte de los derecho humanistas, es lanzar nubes contra acorazados, es querer vencer con arcoíris la balas, es imposible.
Ahora, en cuanto a la pronta respuesta derechohumanista frente a las acciones de la milicia, allí sí estamos hablando de su trabajo, y de algo que se enraiza en la diferencia fundamental entre el criminal y la fuerza del orden, la mesura. La fuerza del orden ha de ser mesurada en sus actos, tanto por métodos internos como externos, no puede actuar de la misma manera que lo hacen los criminales, porque en ese caso la ley pierde sentido, y también el defenderla. Las organizaciones de los derechos humanos existen para ser la conciencia de las fuerzas del Estado, para mantenerlas, hasta donde sea posible, bajo control, para mantenerlas, si se quiere, diferenciadas del crimen organizado.
Ahora, si los policías arrestados por el ejército son culpables, pues se debe llevar un proceso en su contra, y como en todo proceso, como en toda acción de las fuerzas armadas del estado, supervisado por la ciudadanía, o por su representante como lo son las organizaciones defensoras de los derechos humanos.

Not from concentrate



Una muy divertida y... extraña, tira cómica.




martes, abril 01, 2008

Chihuahua militarizado

Quienes me conocen, todas las tres personas, saben que estoy absolutamente opuesto a la militarización, soy un convencido de que la frase “inteligencia militar” es uno de los mayores oximorones de la historia del lenguaje, y que el uniforme de camuflaje siempre me ha hecho sentir desconfianza.
Por eso, en cuando Calderón se puso su trajecito militar y sacó al ejército para combatir al narcotráfico, puse el grito en el cielo, ¡eso no podía ser, no se podía hacer!
Voy a explicar mi punto de vista echando mano de tantos clichés como me sea posible.
El ejército no está entrenado para lidiar con civiles, y los narcotraficantes, por una parte, siguen siendo civiles, pero por la otra, y más importante, se mueven entre civiles, y se ven como civiles, emplean el telón de fondo de los ciudadanos para actuar… de hecho son parte del telón de fondo pues para hablar de un propósito camaleónico, tendríamos que sugerir que los narcos son una especia de fuerza militarizada opuesta al sistema, cuando la triste verdad es que son una expresión criminal de la ley de la oferta y la demanda. No se trata de guerrilleros, milicianos, terroristas o revolucionarios, y por supuesto no se trata de un ejército enemigo invasor. El ejército está entrenado para localizar al enemigo y eliminarlo, y las muertes civiles que sean inevitables son daños colaterales, perfectamente aceptables cuando se trata de una batalla, de acciones militares. Un soldado es sólo en muy raras ocasiones imputable de la muerte de civiles, sobre todo en medio del fragor de la batalla, la cuestión es que en casos normales, un ejército no actuará en medio de los civiles, sino en algún lugar transformado en un campo de batalla.
Las fuerzas militares, en tiempos de paz, deben estar acuarteladas y nunca se les debe movilizar, de nuevo, en tiempos de paz.
Dado lo anterior, ante la necesidad de una fuerza para mantener el orden en tiempos de paz, entre la población de civiles, se crean los cuerpos de policía, civiles ellos mismos, entrenados para luchar entre civiles, su acción en más individualista, más personal. Se supone que los agentes de policía conocen su medio, que es la polis, la ciudad, y saben cómo combatir el crimen dentro de ella. El trabajo del policía es microcirugía, donde el ejército ha de amputar.
Por otro lado, el policía tiene una mayor responsabilidad social y ha de responder por sus actos a un nivel mayor que el militar.
Mientras el soldado ha de seguir ciegamente las órdenes que se le den, pues así es entrenado, el policía tiene mayor libertad para emplear su criterio en las situaciones que se le presenten.
Supongo que a final de cuentas es una cuestión de humanidad, el policía ha de ser humano, mientras el soldado, en el cumplimiento de su deber, ha de dejar de lado la humanidad.
Cuando se trata de la corrupción también hay grandes diferencias, y al contrario de lo que lo más patrioteros puedan pensar, el ejército no es de ninguna manera incorruptible, basta recordar el apellido Rebollo. La cuestión es que, dada la manera en que es entrenado el soldado, y la necesidad de que siga ciegamente las órdenes que se le den, dentro de la estructura de mando militar sólo es necesario corromper a individuos clave, para que quienes estén a sus órdenes actúen sin pensar si esas órdenes vienen justificadas o tienen la motivación adecuada. En este caso también el policía tiene más libertad, pues está dentro de sus posibilidades el detectar y desobedecer las órdenes corruptas, e incluso denunciar la corrupción de sus superiores, sin que vaya en ello la sensación personal de que se está violando una de las cosas más sagradas para los militares, la cadena de mando.
La cuestión es que, como van las cosas en Chihuahua, igual y no fue tan mala la idea de meter al ejército a combatir el narco, y esto viéndolo a la luz de la reacción de las fuerzas del orden. Donde cabría esperar una preocupación de las agencias policiacas por el bienestar del ciudadano común, vemos que sólo se protegen a sí mismos, y se preocupan más que nada por ellos mismos, por sus posiciones y por lo que perciben como maltrato hacia sus personas. Renuncian en masa, en un acto de evidente evasión, haciéndonos recordar el viejo refrán: “El que nada debe, nada teme”.
Pero lo peor viene cuando nos enteramos de que para realizar las operaciones militares, el ejército se ha visto en la necesidad de acuartelar y desarmar a los policías, para que de esta manera los narcotraficantes no se enteren de que viene una operación en camino, pues antes de que el ejército hiciera esto, las operaciones fallaban por que los criminales estaban enterados y tomaban precauciones.
Las situaciones que describí más arriba, que el ejército no debe estar movilizado en tiempos de paz, y que en esos momentos debe ser la policía la encargada de mantener el orden; que nunca debe el ejército ser usado contra civiles y que para eso está la policía. Todo ello es, digamos, un estado ideal, como cuando empleamos los gases ideales para explicar el comportamiento del estado gaseoso. Pero cuando en la realidad tenemos cuerpos de policía profundamente corrompidos, infiltrados hasta la médula por el narcotráfico, además de pobremente entrenados –recordemos que en el pasado el comportamiento de las fuerzas del orden ha sido más brutal y carente de inteligencia que el esperado de parte de las fuerzas armadas-, la idea de emplear al ejército casi se justifica.
Al parecer sí estamos en tiempos de guerra, al parecer nuestra policía es completamente incapaz de mantener el orden, de luchar contra una fuerza que tiene demasiados puntos de contacto con ella, al parecer el ejército está teniendo resultados. Es triste, muy triste.
Muy bien, aceptemos ahora que es necesario el ejército en nuestras calles para combatir al narcotráfico, asumiendo primero la tesis de que la policía es incapaz, ahora consideremos el futuro.
La guerra contra el narcotráfico no se va a ganar a balazos, eso es un hecho, por que los narcotraficantes no son una milicia a vencer, es crimen organizado, son familias donde el crimen se extiende por generaciones. El narcotráfico es, además, un negocio, y no una ideología, por lo tanto es más difícil de vencer; siempre surgirán nuevos “negociantes” que busquen una manera de hacer mucho dinero en poco tiempo.
Las medidas de Calderón sí son demagógicas, y la falta de un plan a futuro, a muy, muy largo plazo para combatir el narco, lo demuestran.